El sistema comunitario de gestión y auditoría medioambientales (EMAS), en vigor desde Abril de 1995, es un mecanismo voluntario destinado a las empresas y organizaciones que deseen evaluar, gestionar y mejorar su comportamiento en materia medioambiental. En el año 2001 se modificó el reglamento dando paso al conocido reglamento EMAS II y en el año 2010 ya entró en vigor la segunda revisión de la evaluación (EMAS III).

Ante todo, EMAS está destinado a mejorar el medio ambiente y proporciona a las organizaciones, los reguladores y el público un instrumento para evaluar y gestionar el impacto medioambiental de una organización.
¿Cuáles son las ventajas de la participación en EMAS?
Las ventajas para las organizaciones participantes son muchas. Algunas de ellas son las siguientes:
  • Garantía del pleno cumplimiento de la legislación medioambiental
  • Menor riesgo de multas relacionadas con la legislación medioambiental
  • Información medioambiental validada independientemente
  • Gestión del riesgo medioambiental
  • Ahorro de recursos y reducción de costes
  • Nuevas oportunidades de negocio en nuevos mercados
  • Mejora en las relaciones con los clientes
  • Mayor capacidad de creación de equipos
  • Mejora la imagen ante la sociedad y los consumidores
¿Cuáles son las etapas de aplicación de EMAS?
Para recibir un certificado EMAS, las organizaciones deben cumplir los siguientes requisitos.
Llevar a cabo un estudio medioambiental. Estudiar todas las repercusiones en el medio ambiente de las actividades de la organización: los procesos de producción, los productos y servicios, los métodos de evaluación y el marco legal, así como las prácticas y procedimientos de gestión ambiental.
Establecer un sistema de gestión medioambiental. Basándose en los resultados del estudio medioambiental, establecer un sistema de gestión medioambiental efectivo destinado a alcanzar los objetivos de la política de medio ambiente definida por la dirección de la organización. El sistema de gestión tiene que definir responsabilidades, objetivos, medios, procedimientos operativos, necesidades de formación y sistemas de control y comunicación.
Efectuar una auditoría medioambiental. Evaluar el sistema de gestión existente y el comportamiento ambiental de la organización a la luz de su política y su programa de medio ambiente, así como de las obligaciones legales.
Preparar una declaración medioambiental. Esta declaración tiene que especificar los resultados que se han conseguido en relación con los objetivos medioambientales de la organización. También debe indicar los medios que se piensan utilizar para mejorar continuamente su comportamiento medioambiental.
Obtener una verificación independiente por parte de un verificador EMAS. El estudio medioambiental, el sistema de gestión medioambiental, el procedimiento de auditoría y la declaración medioambiental tienen que ser verificados por un verificador EMAS acreditado por un organismo de acreditación EMAS de un estado miembro (ENAC en el caso del Estado español).
Registrarse en un organismo competente de un Estado miembro. La declaración medioambiental validada debe enviarse a la CONSEJERÍA DE MEDIOAMBIENTE correspondiente para su registro y ponerse a disposición del público.
La organización recibe un número de registro y, a partir de ese momento, puede utilizar el logotipo EMAS.
¿Qué diferencias hay entre ISO14001 y EMAS?
La Unión Europea ha reconocido que la norma internacional para los sistemas de gestión ambiental EN/ISO 14001 puede constituir una etapa previa a EMAS. La adopción de ISO 14001 como elemento del sistema de gestión medioambiental EMAS permitirá a las organizaciones pasar de la norma ISO 14001 a EMAS sin duplicar esfuerzos.
Sin embargo, EMAS va más allá de ISO 14001 en muchos aspectos. Las organizaciones que participan en EMAS también tienen que cumplir otros requisitos:
  • Comprometerse a mejorar continuamente su comportamiento ambiental.
  • Demostrar que cumplen la legislación de medio ambiente.
  • Poner a disposición del público sus políticas, programas y sistemas de gestión medioambientales, así como la información esencial sobre su comportamiento ambiental.
  • Demostrar que tienen un diálogo abierto con las partes interesadas (empleados, autoridades locales, suministradores, etc).
  • Obtener una validación por un verificador acreditado y registrarse en un organismo competente.
Novedades EMAS III
El Reglamento EMAS III introduce, como novedades más importantes:
  • Introducción del concepto “organización pequeña”, a las que previa solicitud se les permitirá presentar declaraciones actualizadas de manera bienal en vez de anual y la renovación del registro de manera trienal a cuatrienal.
  • Simplificación del logo y su uso, con el objeto de evitar confusión con la ecoetiqueta.
  • Evidenciar el cumplimiento y verificación anual de la legislación vigente, incluyendo en sus auditorías internas la revisión del grado de cumplimiento de la legislación.
  • Refuerzo del papel de los trabajadores estableciendo un “programa de participación de los trabajadores”
  • La incorporación al sistema de gestión ambiental de indicadores básicos a la declaración ambiental y el grado de cumplimiento de la legislación. Como indicadores básicos se incluyen aspectos de eficiencia energética, eficiencia en el consumo de materiales, agua, residuos, biodiversidad y emisiones.
  • Publicación de la declaración como máximo un mes después de la notificación por parte del organismo competente.
  • Posibilidad, además, de registrarse en EMAS a las organizaciones de fuera de la Unión Europea (EMAS Global).